FALTA VINO Y ALGO MÁS PARA LA FIESTA

 

Algunas veces se presentan más participantes de lo normal provocando el consiguiente malestar de no tener la comida y bebida para todos. Son las correrías a última hora, mandando a comprar el refresco y untando los últimos sándwiches con un poco de jalea de fresa. Pero, todo esto se complica más cuando hablamos de eventos grandes: clausuras de fin de año, celebraciones por el cumpleaños, bodas, etc. 

En una boda, tal vez en la tuya o la de tu vecina no pasó, era imposible que sucediese pues estaba todo super organizado con la especialista de bodas, todo todo meticulosamente preparado, por algo ese día tiene que ser perfecto, hasta la composición de las fotos: quien estará  a la derecha o a la izquierda de los novios, no sea cosa que dentro de unos años justamente el novio de tu hermana que era un cantamañanas con complejo de Don Juan esté en medio y no haya forma de borrarlo con un simple recorte de foto. Es una celebración en la cual extrañamos muchísimo a los que partieron dejando una silla vacía y sus recuerdos en nuestro corazón.

Lo más importante es que la pareja se sienta tranquila, que goce de ese día, pues es su día. Solo ellos saben de los obstáculos que superaron para lograr esta confianza mutua que les hace decir públicamente: NOS QUEREMOS y VAMOS A CAMINAR JUNTOS.

Entonces, ¿Cómo es posible que falte el vino? ¿Quién fue el despistado que se le olvido pedir más?, 

Por suerte siempre hay esa persona anónima que sabe como arreglar las cosas, tiene ese "no sé que" para encontrar la solución a todo, su presencia armoniza el ambiente. De un vistazo detectan aquel pequeño detalle que facilita la convivencia, pone la nota de humor cuando todos están a punto de jalarse de los pelos, desdramatizan. Son de esos que el eneagrama llama ayudadores y entusiastas.

De eso las madres saben un rato largo, han sido y son pluriempleadas, su radar sensorial ya detecta cualquier pequeña anomalía. Y María, tenía esa capacidad, sin dudarlo ya mando faena a su hijo, "venga mi niño, date prisa que ya te esperan, simplemente haces lo que tu sabes hacer para que la fiesta continúe". (cf. Jn 2, 1-11) 

Porque cada persona tiene un don, pero algunos les cuesta mostrarlo al público, lo dejan para la intimidad. "No se preocupen ustedes, ya está mi niño aquí para apoyarles" con tanta firmeza lo dicen las madres que los hijos no les queda otra que actuar, pues de lo contrario ya saben lo que les espera en casa. 

 A veces necesitamos de ese empujón de la mamá que nos hace salir de nuestra caracola, pues sabe muy bien cuando estamos preparados para empezar a manifestar nuestro don.

¿Conoces tu don? Si esa cualidad que muchas veces la gente reconoce en ti, es algo tan innato que ni te das cuenta y te crees que todo el mundo lo tiene como tu. Pues déjame decirte que nacemos con un DON MUY PERSONAL, como ese sello que nos identifica, es tu carisma que te motiva a emprender una misión, un tipo concreto de trabajo. 

Como comprenderás la variedad de carismas y dones es muy variada (cf I Cor 12,4-11) pero tienen el mismo origen: la RUAH que alienta la VIDA. Porque los dones están para facilitar el bienestar común, la vida en comunidad, para lograr la UNIDAD entre todos y TODO. 

Y los reparte como quiere, así que no pretendas tener el don de tu vecina cuando estás por estrenar el tuyo. Ama tu propias cualidades, son tan hermosas y solo tu las tienes.

Un don es como un regalo que solo es efectivo cuando lo abres, lo practicas y facilita la vida común. Me imagino esta danza de dones y carismas como un rompecabezas, que cuando ponemos todas y todos nuestra pieza logramos la presencia plena del AMOR INCONDICONAL, la fiesta de la VIDA.

¿CUAL ES TU DON PARA LA FIESTA DE LA VIDA?

¿en qué situaciones se te hace más fácil manifestarlo?

PD: me encantaría tenerte en mi lista de suscriptores y conocerte un poco más.